RADIACIÓN ULTRAVIOLETA EMPLEADA CONTRA EL COVID 19

22.04.2020

Científicos del Laboratorio Acústica y Luminotecnia (LAL), dependiente de la Comisión de Investigaciones Científicas de la provincia de Buenos Aires (CIC), se encuentran desarrollando un equipo de radiación UVC para desinfección. Podría ser empleado para la eliminación del COVID-19 en espacios críticos como hospitales o en ambientes comunes como el transporte público.

"La idea es irradiar con luz ultravioleta", afirmó Pablo Ixtaina, investigador de la CIC y director del Laboratorio de Acústica y Luminotecnia (LAL). El equipo de radiación UVC para desinfección permitiría esterilizar ambientes y eliminar el coronavirus. "Está estudiado que el UVC en dosis adecuadas, elimina gérmenes, bacterias y virus. Si bien no está probado específicamente contra el coronavirus, es esperable que también actúe sobre él.", indicó.

La radiación UVC está comprendida entre 100 y 280 nm, no es visible al ojo humano y posee efectos muy similares a la UVB y UVA, que recibimos cuando nos exponemos al sol. En este sentido Ixtaina aclara que "la eficiencia máxima en la eliminación se logra con longitudes de onda cercanas a 255 nanómetros".

El equipo está compuesto por lámparas similares a los tubos fluorescentes. Los científicos aspiran, en lo inmediato, a lograr los valores correctos de emisión para eliminar el virus, minimizando efectos no deseados. Ixtaina explicó que "el lugar a irradiar no debe estar ocupado por personas, por lo que se deben lograr todas las medidas de seguridad para su manipulación: control de manera inalámbrica, sensores de movimiento, etc."

Se evalúa que los costos de desarrollo en el país podrían ser menores a lo que significaría importarlo, sobre todo teniendo en cuenta la demanda creciente que pueda haber en esta coyuntura de pandemia.

"Se trata de una alternativa o un complemento a los métodos de esterilización convencionales como el alcohol, la lavandina u otro producto de limpieza. En principio lo pensamos para espacios que deban ser esterilizados, donde puede haber ropa o cualquier tipo de material, y que exponiéndolo a radicación durante 15 o 20 minutos eliminaría bacterias, gérmenes y virus del ambiente", explicó Ixtaina.

"En estos momentos nos encontramos determinado cuánta dosis de radiación tiene que tener ya que si es superior a la adecuada podría poner en peligro sustancias o materiales como el plástico, que se degradan con la luz ultravioleta; pero si la dosis no es suficiente no estaría esterilizando", dijo Ixtaina, y agregó que el equipo "se podría usar, en lo inmediato, para esterilizar ambientes en los hospitales públicos o zonas críticas como una sala de espera, por ejemplo. Sin embargo, si lo pensamos a largo plazo, la pandemia va a cambiar algunas pautas de limpieza, por lo que podría ser utilizado también para esterilizar una mesada, el interior de transportes públicos, etc".

A futuro, los investigadores evalúan la posibilidad de reemplazar los tubos fluorescentes por luces pulsantes de alta intensidad o LED, libres de mercurio y que conducirían a diseños más simples de usar.

Del proyecto dirigido por Pablo Ixtaina participan Agustín Pucheta, Carlos Colonna y Nicolás Bufo, investigadores del área de luminotecnia del LAL, en colaboración con la empresa Tecnofábrica SRL, que se encarga de fabricar este tipo de equipamiento y suministra los tubos para los ensayos.