MUJER SE ENCADENÓ AL IOMA IMPLORANDO POR TRATAMIENTO PARA SU HIJA

24.09.2021

Inés Contreras se encadenó a la sede central del IOMA porque la obra social no habilita a la rehabilitación de su hija, quien sufrió severas lesiones tras un accidente en el Gran Buenos Aires. También se había encadenado el martes en la filial Lomas de Zamora. Sigue sin respuesta del Presidente Homero Giles y de autoridades provinciales.  


Inés continúa con su desesperado reclamo de cobertura para su hija en un instituto de alta complejidad dado que su hija, afiliada a la obra social IOMA, sufrió lesiones graves tras un accidente al ser atropellada por un vehículo policial en el sur del Gran Buenos Aires.

La madre, quien al momento del accidente vivía en Río Negro tomó el primer avión para asistir y cuidar a su hija, esperando del IOMA una cobertura a la altura de las circuntancias. Pero ahora, cuando debería empezar la etapa de rehabilitación más compleja los trámites se demoran. Eso derivó, entonces, en la medida de protesta más extrema para obtener las respuestas que aún no llegan.

Este miércoles, en declaraciones al programa El Enfoque Provincial (Keops 90.1 de La Plata), Inés Contreras, denunció que el Instituto Obra Médico Asistencial (IOMA) se niega a cubrirle el tratamiento a su hija, que fue atropellada.

Según contó Contreras, hace dos años y medio que "está en la lucha" contre la obra social estatal desde que, hace tres años, su hija fue atropellada en Lanús Este por una patrulla de la Policía Federal.

Por ese accidente la hija de la denunciante quedó en coma y tuvo que ser operada dos veces en el cerebro. Le tuvieron que sacar parte del cráneo y casi perdió la pierna izquierda. La víctima del choque iba con su hijo, al que por suerte sólo debieron coserle algunos puntos en la frente.

En ese momento, la hija de Contreras tenía 30 años y su nieto cuatro. Luego del accidente fue derivada a un hospital público "donde le hicieron las dos operaciones en el cerebro y le salvaron la vida, además de la pierna izquierda", recordó la madre. En el accidente, la víctima perdió la tibia y el peroné de una pierna. "Es un milagro que esté con vida y evolucionando", comentó la mujer.

Inés Contreras es de Barloche. Por la noticia del choque viajó enseguida y, al día de hoy, no volvió a su casa. "Me convertí en su enfermera y en su kinesióloga para que su cuerpo no quede rígido", cuenta.

En el 2019 Sabrina González, la hija de Inés, recibió el alta en la Clínica Modelo pero permanece internada con un botón gástrico.

La madre inició los trámites para una prestación en un centro neurológico. En su momento lo hizo en la delegación de IOMA en Lanús y, tras la pandemia, cuando volvió a retomar el trámite se enteró de que se lo habían "cajoneado".

Según pudo saberse, Inés mandó la documentación de su hija al Fleni de Escobar, que es un centro neurológico, y al Santa Catalina de Capital Federal, que tienen convenio con IOMA.

Inés comenzó a reclamar junto a otras personas para que la obra social le respondiera, y logró que la llamaran desde la sede de Lomas de Zamora, donde dio inicio a los últimos dos expedientes este año.